Washington, 9 oct (PL) Los ataques verbales entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el senador republicano por Tennessee Robert Corker sumaron hoy un nuevo capítulo al diferendo personal de los últimos días.
Según el legislador, quien preside el Comité de Relaciones Exteriores de la cámara alta, las amenazas del jefe de Estado «pueden llevar a este país a la tercera guerra mundial».
Trump considera su trabajo en la Casa Blanca como una especie de «reality show», apuntó Corker en una entrevista con el diario The New York Times.
Manifestó que el mandatario, «cuyas publicaciones en la red social Twitter dañan los esfuerzos diplomáticos de Estados unidos», lo molesta y molestaría a cualquiera que se preocupe por la nación.
Sé que en varias ocasiones sus tuits nos perjudicaron en lo que respecta a negociaciones, acotó el senador, quien anunció el mes anterior que no buscaría su reelección en el cargo.
La víspera, Corker estimó en la mencionada plataforma de microblogging que la Casa Blanca se había convertido en un centro de cuidado para adultos mayores, y alguien obviamente se perdió su turno en la mañana.
Dichos comentarios se produjeron después de varios mensajes de Trump en Twitter, en los cuales indicó que no respaldaba la reelección del Corker a la cámara alta por carecer de agallas.
El senador Bob Corker me rogó que lo respaldara para su reelección en Tennessee, dije No, y él se retiró (dijo que no podía ganar sin mi aprobación), apuntó el gobernante.
Además quería ser secretario de Estado, le dije No, gracias. ÂíÉl también es en gran parte responsable del trato horrible con Irán!, añadió Trump.
En otro de sus tuits, el jefe de la Casa Blanca afirmó que el senador podría ser «una voz negativa que se interponga en nuestra gran agenda» y «no tenía las agallas para correr» como candidato durante las elecciones de medio término el año próximo.
Corker, convertido cada vez más en un crítico de Trump, aseguró la semana pasada que los secretarios de Estado, Rex Tillerson, y de Defensa, James Mattis, y el jefe de Gabinete, John Kelly, están protegiendo al país del caos.
Sin embargo, agregó, «hay otras personas en la administración que, a mi juicio, no lo hacen».
Destacó que los tres titulares «trabajan bien juntos para asegurarse que las políticas que presentamos en todo el mundo sean sólidas y coherentes», y «espero que se queden».
Por su parte, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, trató entonces de atajar rápidamente estas declaraciones y aseguró que el presidente estadounidense es «el hombre que protege al mundo del caos».
Tiene un equipo increíble que lo ayuda a encabezar estos esfuerzos y tuvo tremendos logros en la escena internacional al trabajar con aliados y enfrentarse a enemigos, apuntó la vocera.
La consejera de la Casa Blanca, Kellyanne Conway, criticó este lunes a Corker en un programa de televisión de la cadena Fox y sostuvo que la puerta del presidente siempre estará abierta para hablar con los legisladores en privado.
Para la televisora CNN, la guerra de Trump con Corker es un ejemplo clásico de cómo el mandatario se coloca en oposición al «establishment» del Partido Republicano para complacer a los partidarios que odian a Washington.
Esta fue la última señal, opinó el medio, de que el presidente puede estar preparado para enfrentar eficazmente a su propio partido en los comicios de 2018.
Además, los ataques al legislador llegaron tras difundirse noticias de que el exjefe de estrategia Trump, el polémico Stephen Bannon, elaboró una lista de senadores del partido rojo a quienes cree necesario cambiar el año próximo.
La televisora y otros medios advirtieron que los problemas con Corker podrían traerle malas consecuencias al jefe de Estado, pues hasta que abandone su escaño necesitará ese voto en temas fundamentales de su agenda como la reforma tributaria.
Del mismo modo, el diario The Washington Post recordó que Corker, como presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, es una voz poderosa en lo concerniente a política exterior.
«Ahora Corker no tiene nada que perder, y tal vez un montón que probar», señaló el rotativo, que llamó la atención sobre el papel que tendría el senador en una esperada revisión del acuerdo nuclear con Irán.
Esta semana, probablemente Trump anunciará que no certificará el cumplimiento del pacto por parte de la nación persa y dará un plazo al Congreso para determinar el camino hacia adelante en la materia.
De acuerdo con el Post, en el debate bipartidista que podría darse sobre el asunto «el muy respetado Corker» jugaría un gran rol, pues «si hay algún republicano en el Capitolio que tenga la oportunidad de persuadir a los demócratas a venir a bordo es él».